Momentos de mucha emotividad se vivieron ayer en el Regimiento de Infantería de Monte 29, en oportunidad de recordarse el Día del Soldado Formoseño, fecha coincidente con el ataque subversivo a la unidad militar ejecutada por el grupo guerrillero montoneros en octubre de 1975.El gobernador Gildo Insfrán presidió la ceremonia que se desarrolló en la plaza de armas “De la Victoria”, y que tuvo entre los asistentes al general de Brigada Jorge Ángel Tellado, comandante del II Cuerpo de Ejército, y al jefe de la Brigada 12 con asiento en Posadas, Misiones, general de Brigada, Mario Gabriel Dotto. Ofició de anfitrión el jefe del Regimiento de Infantería de Monte 29, teniente coronel Fernando Augusto Jáuregui.Hubo testimonios –diplomas y medallas- a quince ex soldados que resultaron heridos durante el acto subversivo, y luego a casi un centenar de trabajadores de la salud, entre médicos, enfermeros, administrativos y personal de maestranza del Hospital Central que brindaron atención médica a los heridos de aquel entonces.Fueron permanentes las expresiones de reconocimiento a la valentía del soldado formoseño y de la misma comunidad que sintió el ataque, subrayándose el arrojo de aquellos jóvenes que dieron la vida. El tradicional llamado a cada uno de los caídos y la respuesta de “presente” de la formación, espectáculos de luces y sonidos, la atractiva fusilería histórica, una suelta de trece globos iluminados (testimonio a cada uno de los muertos), desfile y una retreta final, marcaron los momentos más especiales vividos en la ceremonia.Los homenajes comenzaron en horas de la mañana en el cementerio Virgen del Carmen, con una oración y depósito de ofrendas florales en memoria de los caídos.
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